GRUPO EL DEBER: DEL LEGADO A LA ERA 360

GRUPO EL DEBER: del legado a la era 360

GRUPO EL DEBER: del legado a la era 360

• Por Regina Ortiz / Fotografías Ricardo Montero

Mauricio Rivero, Gerente General del grupo multimedia, revela cómo la institución más emblemática del periodismo boliviano se reinventa para dialogar con las nuevas generaciones, sin perder su esencia.

En la historia contemporánea de Bolivia, pocos nombres poseen la fuerza simbólica de EL DEBER. Fundado hace 72 años, el diario cruceño se ha consolidado como el referente informativo y editorial del país, acompañando los grandes procesos sociales, económicos y culturales de la nación. Hoy, bajo el liderazgo de Mauricio Rivero, Gerente General, el grupo atraviesa un momento clave: dejar atrás el molde de “periódico” para transformarse en un ecosistema multimedia integral, con un modelo de gestión que apunta a la innovación, la sostenibilidad y la conexión con las futuras generaciones.

Un legado con propósito

Rivero subraya que el verdadero valor de EL DEBER radica en la confianza construida con sus lectores a lo largo de más de siete décadas. Ese legado dice no se limita a una historia de periodismo comprometido, sino que refleja una capacidad empresarial de resiliencia y coherencia, guiada por principios y vocación de servicio a la comunidad. “Honrar esa historia significa proyectarla hacia el futuro, innovando, formando nuevos talentos y siendo coherentes entre lo que decimos y lo que hacemos”, afirma.

De diario a grupo multimedia

La evolución del medio ha sido un proceso gradual y estratégico. Nacido en papel, EL DEBER se expandió al mundo digital, la radio y las redes sociales. Hoy apuesta de lleno por el streaming y la televisión digital, con un proyecto que Rivero denomina ED360: una plataforma de medios que abarca desde la cobertura informativa tradicional hasta productos audiovisuales de nueva generación.

Este salto ha sido posible gracias a la incorporación de inversionistas y un directorio renovado, que comparte la visión de una empresa digital-first con proyección internacional. “El periodismo no depende del formato, sino del propósito. Adaptarnos a las nuevas tecnologías no es abandonar nuestra esencia, sino llevarla donde están las audiencias”, enfatiza el ejecutivo.

ED24 y BULLA: narrativas para nuevas audiencias

El hito más reciente de esta reinvención es ED24, la señal de streaming–TV que extiende la voz de EL DEBER a nuevos públicos con un lenguaje audiovisual ágil, crítico y contemporáneo. “No buscamos solo contar las noticias, sino explicar lo que hay detrás de ellas. ED24 conserva el ADN de la marca, pero con una narrativa pensada para nativos digitales”, puntualiza Rivero.

En paralelo, la organización ha lanzado BULLA, un canal juvenil con contenidos frescos, como el programa De tu taco, estrenado en la Expocruz. El proyecto forma parte de la estrategia de diversificación bajo la marca paraguas ED360, con productos diseñados para distintos targets y plataformas.

Innovar sin perder la identidad

En un mercado mediático marcado por la sobreoferta de información, la inmediatez y la desinformación, EL DEBER busca diferenciarse combinando tecnología, creatividad y, sobre todo, credibilidad. “No queremos convertirnos en una empresa de entretenimiento masivo. Apostamos por contenidos rigurosos y confiables, pero presentados en formatos amenos y adaptados a los hábitos de consumo actuales”, explica Rivero.

Futuro y sostenibilidad

Para el gerente general, el motor de esta nueva etapa es la integración de la experiencia del equipo senior con el talento joven en áreas como periodismo, marketing, data y producción audiovisual. Esta combinación, asegura, permitirá a EL DEBER seguir siendo escuela de periodistas y, al mismo tiempo, espacio de innovación para nuevas generaciones.

Impacto y visión de país

El ejecutivo subraya que un medio de comunicación no puede limitarse a informar: debe contribuir a la construcción de ciudadanía. En tiempos de polarización, EL DEBER se asume como un referente que fomenta el debate informado, la democracia y la libertad. Desde su sede en Santa Cruz, proyecta su alcance hacia todo el país con el objetivo de ser un actor nacional que visibilice voces diversas y acompañe la agenda del desarrollo.

De Bolivia al mundo

Con la mirada puesta en la internacionalización, el Grupo explora alianzas estratégicas en el mundo hispano y la producción de contenidos digitales exportables. “Queremos llevar la voz de Bolivia al mundo, sin perder nuestra esencia y nuestra identidad”, asegura Rivero.

El mensaje final

A los lectores, a las nuevas generaciones y a los propios periodistas, el gerente general deja una reflexión: “El periodismo sigue siendo una herramienta poderosa de cambio. Nuestra defensa está en la verdad y en la vocación de servicio. Hemos pasado momentos desafiantes, pero hoy contamos con la fuerza empresarial para seguir haciendo lo que nos apasiona”.